El manejo de líquidos es el pilar fundamental de los flujos de trabajo en laboratorio: desde la preparación de muestras y dispensación de reactivos hasta el acondicionamiento de ensayos, donde la precisión impacta directamente en la reproducibilidad experimental y la confiabilidad de los datos. En el centro de soluciones eficaces para el manejo de líquidos se encuentra una gama de consumibles de alto rendimiento, diseñados a medida para eliminar errores, prevenir la contaminación y optimizar la eficiencia en sistemas manuales y automatizados.
Las soluciones de secuenciación genética han revolucionado campos que van desde el diagnóstico clínico hasta la biotecnología agrícola, y en su núcleo yace la confiabilidad de la Reacción en Cadena de la Polimerasa (PCR), una técnica fundamental para amplificar segmentos específicos de ADN.
Los biobancos actúan como repositorios críticos para muestras biológicas, desde tejidos y sangre humanos hasta cultivos microbianos, apoyando avances en medicina personalizada, investigación de enfermedades y desarrollo de medicamentos. Fundamental para mantener la viabilidad de las muestras durante meses o décadas es el uso de consumibles de almacenamiento criogénico de alto rendimiento, con crioviales que se posicionan en la primera línea de protección de las muestras.